Los conserjes, también llamados celadoras o celadores, son los principales responsables de la conservación y mantenimiento de un inmueble o escalera de vecinos. Cuidan de los bienes que forman parte del edificio, de las áreas comunes y se encargan de la tenencia de claves. Además, llevan a cabo labores de limpieza.
En Limpex creemos que es imprescindible que el conserje sea un profesional cualificado y de confianza, puesto que sus tareas implican destrezas tanto técnicas cómo sociales. Tiene que conocer a los vecinos para saber detectar la presencia de extraños, y avisar de cualquier incidencia que se produzca.